CHATENET CH40, EL ¿COMIENZO O FIN DE UNA EPOCA?

Hace poco más de un año que la casa Chatenet nos sorprendió, obligada por las circunstancias, con el lanzamiento de su nuevo modelo de coche sin carnet. Tras las primeras impresiones, en las cuales no dejó indiferente a nadie, la trayectoria durante estos meses parecen mostrar que este  nuevo coche sin carnet no acaba de seducir por completo al mercado. Aprovechamos la ocasión para analizar algunos de los puntos clave de su nacimiento y, hasta el momento, pequeña historia. Es fundamental para entender este nuevo lanzamiento que el Chatenet CH26 fue uno de los modelos de coches sin carnet más exitosos de la historia. Ahora, su sucesor, el CH40 ,tiene la ardua tarea de repetir su éxito, a pesar de sus dimensiones más pequeñas, adaptadas para cumplir con las nuevas regulaciones europeas. Un nuevo modelo que ha dado lugar a una nueva generación de coches sin carnet del fabricante de Pierre-Buffiére.

Desde que se supo que Chatenet trabajaba en un nuevo modelo, todo el sector esperó su presentación con más expectación que realmente entusiasmo. El CH26 no sólo había resistido con gran éxito al paso de los años, sino que incluso había mejorado, introduciendo innovaciones técnicas más o menos destacables, así como variadas gamas de equipamiento. De hecho, de no haber sido por la necesidad de cambiar el tamaño del vehículo debido a los nuevos estándares, seguramente aún habríamos visto a este cautivador coche sin carnet durante unos cuantos años como buque insignia de la casa Chatenet.

Al igual que su predecesor, el CH40 destaca por un estilo propio y muy marcado. Estéticamente, el nuevo Chatenet mantiene las líneas típicas de la marca.

Solo con verlo se reconoce con la imagen de Chatenet, y no se asocia a una mera copia de algún modelo de turismo, como puede ocurrir con el Ligier JS50 o el Bellier B8.

Este nuevo modelo, obra del diseñador Christian Polo, mantiene varias  semejanzas con la versión anterior, como la forma externa de la parrilla, y los paragolpes delantero y trasero intercambiables. Donde mayor diferencia se encuentra, además del tamaño, es en el portón trasero, menos vertical que en el CH26, con un resultado final que media entre este modelo y la versión Coupé Sporteevo. En la apariencia externa se juega también con los techos bicolor, moda ya establecida desde hace unos años en el mundo del coche sin carnet. Dispone de un panel frontal con faros más pequeños y rodeados por un halo de diodos que funcionan como luces diurnas.  Sus colores metálicos llaman la atención, por ejemplo el gris que asemeja al utilizado por Range Rover.

 

El interior es sencillo, moderno, aunque ya no se presenta un salpicadero cargado de instrumentos como en el CH26, pero sí conserva su espíritu. En la generación anterior podía elegirse del color de la carrocería, pero ya no es el caso. Se ofrecen tres acabados:. carbono, aluminio, o negro brillante Esta gama de opciones recuerda mucho a la propuesta por Aixam en sus versiones deportivas. En general,  es más austero que el modelo anterior, pero los materiales sí presentan una calidad satisfactoria.

Lo único común con el modelo anterior dentro del habitáculo son los asientos tipo cubo, incorporados en la versión Sporteevo.

Aunque la casa Chatenet declara tener un equipamiento muy completo,  la realidad es que existen carencias sorprendentes a día de hoy en su gama, tales como la climatización, que no está disponible ni siquiera como opción, mientras que sí existió esa posibilidad en el anterior CH26. Además no ofrece extras como GPS, ABS,etc…que sí incorporan otras marcas del mercado.

En prácticamente todos los aspectos este modelo se caracteriza mucho más por marcar un estilo propio que por la calidad de los acabados, pero como Chatenet está acostumbrado a mejorar sus modelos a lo largo de los años, esperamos que estos detalles se revisen en las próximas ediciones.

La posición de conducción es óptima. El modelo de asientos tipo cubo está tomado, como comentábamos, de la antigua versión Sporteevo. Muy estéticos, pero también cómodos. Las postura de conducción es impecable, mejor que en el CH26, donde la visión del conductor se alineaba con la parte superior del parabrisas. En este nuevo modelo la visión es perfectamente clara. No se puede decir lo mismo de la visión trasera, dado que se ha reducido mucho el campo de visión respecto al modelo anterior.

Con respecto al maletero, presenta apertura externa, característica que se ha convertido en estándar actualmente en la mayoría de los modelos del mercado. La apertura del portón es más estrecha que en el CH26, pero superior a la versión Sporteevo. Lógico dado que el estilo trasero del nuevo modelo se encuentra a medio camino entre el Sedán y el Coupé. Esto no impide que la accesibilidad sea correcta, con un volumen de carga adecuado y facilidad de manejo.

SOLO MOTOR DCI

La normativa Euro4 ha obligado a Chatenet a cambiar su motorización. Su antiguo proveedor, la casa japonesa Yanmar optó por retirarse del mercado del coche sin carnet, dado que las inversiones necesarias para cumplir con los requisitos ambientales eran demasiado altas en comparación con el retorno comercial de la misma.  Por lo tanto, es al fabricante italiano Lombardini a quien se ha dirigido Chatenet, eligiendo la versión DCI como única motorización de momento en la gama CH40. El motor toma como nombre comercial Kohler (grupo estadounidense propietario de Lombardini) HDI, dado que el grupo Ligier tiene la exclusividad del nombre DCI para su gama. Las características del motor son idénticas a las encontradas en  los coches de Ligier y Microcar, desarrollando una potencia de 6 kw, el máximo permitido por las nuevas regulaciones. El sonido en ralentí es óptimo, similar a lo que estamos acostumbrados a ver en Ligier, pocas vibraciones, y un excelente rendimiento. Incluye también la función Easy Parking, que mueve el vehículo hacia adelante a baja velocidad cuando se suelta el freno, para facilitar el estacionamiento.

Esta motorización, que encarece el precio final del vehículo, completa la ambición de Chatenet para colocar su modelo entre los más altos de gama del mercado, tomando como referencia principalmente a Casalini, asi como los Ligier JS50 Elegance y Sport.

La llegada del CH40 provoca un cambio total en la gama de Chatenet. De hecho, no solo es el CH26 el que sale del mercado, sino la totalidad de los modelos actuales, desde el CH32, hasta el Pick Up y el Sporteevo. Todos han sido sacrificados por motivo de los nuevos estándares de fabricación. Sin embargo, da la sensación de que el recién llegado derivará en los próximos años en muchas versiones, dando lugar a una gama más completa, e intentando obtener un desarrollo en el tiempo y éxito similar al CH26.

No es fácil para la marca francesa reemplazar un fenómeno como el modelo anterior. El Chatenet CH40 tiene la ardua tarea de suceder al CH26, reconocido por unanimidad en el mercado por su estilo. Al igual que su predecesor, este coche sin carnet se posiciona entre los vehículos de alta gama, y ofrece un buen rendimiento. Todavia debe mejorar algunos detalles en próximas versiones, pero la marca Chatenet está convencida de que tendrá éxito en su apuesta. Surgieron muchas dudas con las primeras imágenes que facilitó Chatenet de su modelo, así como de los comentarios del público respecto a las mismas en redes sociales.

Pero una vez lo hemos visto ya en el mercado, queda claro que el CH40 sigue la línea e imagen de marca de Chatenet. Es cierto que no causa el impacto del CH26, pero sí deja clara cierta personalidad propia, y que se ha intentado trabajar la imagen y el diseño lo máximo posible, intentando marcar una diferencia considerable con sus competidores. Aunque para que consiga seducir al mercado todavía tiene que afinar algunos detalles de acabado, especialmente en en el interior, así como dotar a este coche sin carnet con equipamientos extra como aire acondicionado, espejos eléctricos, GPS, e incluso la tapicería en cuero auténtico, para poder alcanzar la posición de lujo que hoy en dia representan coches como el M20 de Casalini.